El ser para otr@s

El ser para otr@s por Natalie Artal
Sobre la "belleza femenina" y el testeo en animales.

La pin up doll de los 40 y 50 podría dibujarnos un estereotipo de mujer al servicio de otros, este último retomado últimamente por las chicas y algunos chicos. La mujer es vista en estos dibujos como ser pasiva que es deseada (por otro), que se exhibe (ante otro), y que se transforma para conseguir entrar en un molde, evaluación que debe pasar necesariamente ante otros.

Y es que desde que mitológicamente el occidente comienza a plasmar lo que debe ser una "mujer", y más aún desde que estas imposturas fueron "mejoradas" por otros sujetos como Kant, dictando qué es lo bello en ella, se deja claro que la mujer, quizás por su "capacidad de incubadora", debe ser pasiva que no debe "esforzarse" por entender, su función está en ser bella, ser madre y ser esposa: ser para otros.

De esta forma y hasta hoy, y hasta en los espacios más "libertarios" forjados, esta secuencialidad de rasgos de una "adecuada mujer" se mantiene, y es claro que nosotras mismas somos responsables de mantenerlo. A pesar de tener la misma cantidad de neuronas que un varón, ni hombres ni mujeres cuestionan más allá las relaciones que se dan y a pesar de ser "superiores" a los animales no humanos y de "poseer lenguaje", no nos quejamos, no gritamos...

No nos quejamos ante el machismo de los compañeros o de las compañeras, no somos capaces de dejar esas dietas insoportables, no somos capaces de dejar de echarnos cera caliente en la piel para quitarnos los pelos porque "las niñas con pelos parecen hombres", no somos capaces de exigir un profiláctico al "viril y semental" varón, no somos capaces de autoeducarnos sobre nuestros cuerpos y de exigir que se nos entregue información, no somos capaces de hablar de nuestra sexualidad... no somos capaces de abrir la boca: quizás es el temor de que se corra el pinta labios, quizás es más cómodo, cada una sabe.

Ante la misma razón: de que tenemos razón y que cada una sabrá sus porqués, lo interesante es dar pie a la reflexión y a la información. En este sentido parece importante saber qué nos estamos echando al cuerpo, cómo lo intoxicamos por dentro y por fuera, cómo aquellos lápices labiales que se "ultra fijan" que contienen plomo, alquitrán, cera y que pueden producirte cáncer (!). Por otra parte antes de intoxicarnos a nosotras o nosotros, o de intentar no intoxicarnos, las empresas testean los productos en animales bajo una mentalidad especisista que indica que por estar ellos "bajo" nosotros, deben ser aún más pasivos, tan pasivos como puedan para no sentir dolor ante las enfermedades y heridas que estos tésteos producen...

¿No has pensado que compras cosas que no necesitas? ¿Quiénes nos hacen sentir que necesitamos tal o cual producto? ..."

Extraido de la revista "estado vegetal" año 3 número10 -2007